Blog - Depresión Posparto

3 razones por las que la dieta puede ser útil en la  prevención de la depresión post-parto ( DPP )

 

La depresión post-parto es una condición que afecta del 10-15 % de las mujeres después de dar a luz.

Clásicamente se ha hablado de factores de riesgo como por ejemplo: antecedente de depresión o ansiedad en la mujer, falta de apoyo por parte de su pareja o de su familia, dudas o miedos acerca de su nuevo rol como mamá, etc.

El tratamiento usualmente va dirigido a la psicoterapia y la administración de antidepresivos.

 

Sin embargo, existe una manera más holística de abordar el problema, en donde la dieta, como en la mayoría de las enfermedades, juega un papel primordial.

 

1-   Se ha visto en varios estudios, que algunos marcadores de inflamación ( sustancias que se aumentan cuando hay inflamación en el cuerpo) como la homocisteína, están aumentados en las mujeres con DPP.  Esto significa que una dieta anti-inflamatoria podría ser un primer paso en el tratamiento.   Esta dieta consiste en reducir aquellos alimentos que se sabe generan inflamación a través de diversos mecanismos; el mejor ejemplo de un alimento a evitar es el azúcar y la harina refinados, presentes en el pan blanco, repostería, galletas, postres, jugos y refrescos artificiales, etc

2-   Se sabe que las vitaminas B6 y B12 están implicadas en el metabolismo de la homocisteína, y por lo tanto su deficiencia se ha relacionado también con la DPP. La B6 está presente en los lácteos, huevos, granos o cereales enteros ( integrales ) , frutas secas y carnes.  La B12 es de origen exclusivamente animal, en huevos, lácteos y carne. Su consumo balanceado es importante en la prevención de la DPP.

3-   Los alimentos con poder anti-inflamatorio que se han estudiado en estas pacientes son las grasas saludables ( Omega-3 ), cuyo consumo es altamente recomendado. Están presentes en pescados como el salmón o el atún, nueces, semillas, aceite de oliva y aguacate.

 

     Otros hábitos o estilos de vida que pueden hacer la diferencia en la evolución o en la aparición de la DPP son:

  • El ejercicio, que por  la liberación de                 endorfinas, es recomendable en casos de depresión de cualquier origen.
  • La meditación, no solo por ser un método anti-estrés comprobado, sino también porque su efecto positivo se ha estudiado también en casos de depresión, en donde se sabe que produce alteración física real en el cerebro, haciendo más pequeñas las zonas cerebrales encargadas del miedo, la ansiedad y la depresión  ( efecto conocido como plasticidad cerebral).

Como ven, la DPP también es una condición que puede ser abarcada de manera integral, y existe, como en la mayoría de los diagnósticos, ajustes que podemos hacer en nuestro estilo de vida antes de recurrir a los antidepresivos y todas las consecuencias que estos conllevan.